Cribado cuádruple
¿Qué es? El cribado cuádruple es un
análisis sanguíneo que mide los niveles
de cuatro sustancias producidas por el
feto, y que pasan al torrente sanguíneo
de la madre: la alfa-fetoproteína (AFP),
la GCh, el estriol y la inhibina-A.
(Algunos médicos sólo miden los
niveles de tres de estas sustancias, en un
cribado triple.) Los niveles altos de
AFP pueden sugerir la posibilidad (pero
de ningún modo la probabilidad) de que
su bebé tenga un mayor riesgo de sufrir
de un defecto del tubo neural. Los
niveles más bajos de AFP y los niveles
anormales de los otros marcadores indican que el bebé que se está
desarrollando tiene un riesgo mayor de
sufrir una anormalidad cromosómica, tal
como el síndrome de Down. El cribado
cuádruple, como todos los tests de
cribado, no puede diagnosticar un
defecto congénito, sólo es un indicador
de un riesgo mayor. Cualquier resultado
anormal indica simplemente que se
precisará investigar más.
Es curioso que los estudios indican
que las mujeres que tienen unos
resultados anormales en el cribado
cuádruple, pero luego tienen resultados
normales en las siguientes pruebas, tales
como la amniocentesis, puede que aún
tengan unos riesgos ligeramente
elevados de ciertas complicaciones del embarazo, tales como un bebé
demasiado pequeño para su edad
gestacional, un parto prematuro o
preeclampsia. Si recibe unos resultados
de este tipo, pregúntele a su doctor qué
medidas puede tomar para reducir las
posibilidades de cualquier complicación
potencial más adelante, teniendo
siempre en cuenta que la asociación
entre los resultados anormales y tales
complicaciones es siempre muy leve.
¿Cuándo se lleva a cabo? El cribado
cuádruple se lleva a cabo entre las
semanas 14 y 22.
¿Qué eficacia tiene? El cribado cuádruple puede detectar si el riesgo de
aproximadamente el 85% de los
defectos del tubo neural, casi el 80% de
los casos de síndrome de Down y el
80% de la trisomía 18 es mayor de lo
normal. La tasa de falsos positivos del
cribado cuádruple independiente es alta.
Sólo una o dos de cada 50 mujeres con
unos resultados anormalmente altos
tienen en realidad un feto afectado. En
las otras 48 o 49, los tests posteriores
revelan que la razón de que los niveles
de las hormonas sean anormales es que
hay más de un feto, o que el feto es unas
pocas semanas mayor o menor de lo que
primero se creía, o simplemente, los
resultados del test estaban equivocados.
Si la mujer tiene un solo feto y la ecografía demuestra que las fechas son
correctas, se ofrecerá la amniocentesis
como paso siguiente.
¿Es seguro? Dado que el cribado
cuádruple requiere sólo de una muestra
de sangre, es muy seguro. El riesgo
principal de este test es que un resultado
positivo la obligue a pasar por otros
procedimientos que tienen un riesgo
mayor. Antes de que decida tomar
cualquier decisión, basándose en los
resultados del cribado prenatal, consulte
con un médico experimentado o con un
consultor genético que evalúe sus
resultados. Un resultado falso
Las futuras mamás se someten a los
cribados por la tranquilidad que éstos
pueden proporcionarles, pero por
desgracia lo que sucede a menudo es
que el resultado (particularmente del
cribado triple o cuádruple) es un
falso positivo (parece que las cosas
no van bien, hasta que finalmente se
comprueba que no existe problema
alguno). Así desaparece la
tranquilidad que esperaba encontrar y
se presenta la innecesaria ansiedad y
preocupación que tanto quería evitar.
Ésa es la razón de que sea tan
importante empezar los procesos de
cribado con una discusión abierta con
su médico sobre la alta tasa de falsos
positivos, y sobre lo que realmente
significa si el resultado de su cribado
resulta ser uno de ellos. Lo que oirá
son estas tranquilizadoras noticias:
más del 90% de las mamás que tienen
un resultado positivo del cribado
tendrán un bebé sano. ¡Sea positiva!