Formas alternativas de dar a luz


Desde el principio (¿cuándo concebir?) hasta el final (¿cómo dar a luz?), el embarazo está lleno de decisiones personales. Cuando se trata del método para parir un hijo, el abanico de opciones es enorme, incluso en el interior de las instalaciones hospitalarias. Y fuera de los límites del hospital, aún hay más donde escoger. Aunque sus preferencias de cara al parto no deberían ser el único criterio a la hora de elegir un especialista, sí que las debe tener muy presentes. A continuación le describimos las opciones de parto que están a su alcance hoy en día. Pregunte a sus posibles candidatos sobre cualquiera de estos métodos –o de otros– que le interesen particularmente (sin olvidar que las decisiones definitivas sobre el parto no se pueden tomar hasta que el embarazo está bien avanzado, o incluso en el mismo momento del parto):

Habitaciones para dar a luz

La disponibilidad de habitaciones para el parto en muchos hospitales hace que sea posible estar en la misma cama desde la dilatación hasta la recuperación (en vez de dilatar en una habitación y ser trasladada posteriormente a la sala de partos, cuando esté a punto de dar a luz), y a veces incluso durante toda su estancia en el hospital, con el fin de que su bebé esté a su lado desde el mismo momento de nacer. Y lo mejor de todo es que las habitaciones para dar a luz son tranquilas y cómodas. Algunas habitaciones para el parto sólo se usan durante la dilatación, para el parto y para la recuperación (DPR). Si da a luz en una sala de DPR, usted (y su bebé, si permanece en la misma sala) serán trasladados de la sala de partos hasta la de pospartos al cabo aproximadamente de una hora totalmente ininterrumpida de unión familiar. Si tiene la suerte de estar en un hospital que le ofrece salas de DPRP (dilatación, parto, recuperación y posparto), no habrá necesidad de que la trasladen en ningún momento. Usted y su bebé –y, en algunos casos, el padre e incluso los hermanos– podrán permanecer juntos desde el momento de su llegada hasta el momento de irse. La mayoría de las habitaciones para el parto de los hospitales pretenden ofrecer un ambiente acogedor, con una iluminación tenue, balancines, paredes bien decoradas y cuadros relajantes, cortinas en las ventanas y camas que se parecen más a las que salen en los catálogos de mobiliario para el hogar que a las típicas de los hospitales. Aunque dichas habitaciones están cuidadosamente equipadas para los nacimientos de bajo riesgo e incluso para las emergencias inesperadas, el equipo médico suele mantenerse fuera de la vista, detrás de las puertas, los armarios o cualquier otro tipo de mobiliario. La cabecera de la cama se puede levantar para que se apoye la partera en una posición agachada o semirrecostada (si se quiere, también se puede sujetar a una barra para agacharse) y los pies de la cama se pueden separar para dejar lugar para los asistentes al parto. Después de dar a luz, un cambio de sábanas, unas pocas modificaciones, y a punto para volver a la cama. Algunos hospitales y centros para dar a luz también disponen de duchas o bañeras de tipo jacuzzi en el interior de la habitación o en las salas adyacentes, para aprovechar los beneficios de la hidroterapia durante la dilatación. Algunos hospitales y centros para dar a luz disponen de bañeras especiales para parir en el agua. (Para más información sobre el parto en el agua, véase "Formas alternativas de dar a luz".) Muchas habitaciones para el parto disponen de sofás para los acompañantes o las visitas y, a veces, incluso de una cama para que el acompañante pueda pasar la noche. En algunos hospitales, las habitaciones para dar a luz sólo están disponibles para las mujeres que tienen un riesgo muy bajo de complicaciones en el parto;si éste no es su perfil, no tendrá más remedio que ir a una sala de dilatación y de partos tradicional, en la que se dispone de más equipo tecnológico. Y la sala de partos por cesárea siempre se corresponde con un quirófano típico (sin ningún tipo de ambientación casera). Sin embargo, y por suerte, dada la creciente disponibilidad de salas de parto para la mayoría de las mujeres, son muchas las posibilidades de disfrutar de una dilatación y un parto sin prisas, agradable y no intervencionista, dentro del marco de un hospital convencional.

Comentarios